jueves, 2 de junio de 2011

Libros impresos o libros electrónicos. ¿Cuál escoger?





El debate entre los e-books y los libros impresos no se centra solamente en las características de ambos, hay otros elementos implicados que tienen una muy difícil cuantificación y que tienen una gran importancia como por ejemplo el factor socio-cultural es muy importante y no es fácilmente evaluable. Están involucrados hábitos y tradiciones, prácticas y rituales, historia y cultura. Todos estos elemento pesan más que muchos otros factores objetivos. Aunque inicialmente se suponía que los e-book iban a tener un gran éxito, llegando incluso a sustituir el libro convencional, la realidad no ha sido así. Es un debate que en muchos aspectos es semejante al de los periódicos online y los físicos.

En este debate entre libro convencional y libro electrónico son muy importantes las consideraciones realizadas por CoryDoctorow en su artículo “E-books: Neither E, NorBooks”, que es una transcripción de su conferencia pronunciado en la Conferencia O’Reilly sobre Tecnologías Emergente en el año 2004. En este artículo los principales comentarios que realiza son los siguientes:

·         Considera que los e-books no son solo una técnica de marketing que permite vender más libros convencionales, y que cada vez hay más gente que lee en pantalla y menos lectores del papel
·         Las propiedades de los e-books los hace complementarios de los libros físicos, llegando a afirmar que si no posees el libro electrónico no posees el libro. Señala que el libro no se debe considerar como un objeto o un producto, sino en un sentido más amplio, como una práctica, como una colección de actividades sociales, artísticas y económicas, propugnando el papel que desempeña el libro para difundir ideas y compartir conocimientos. Las características del e-book son idóneas para esta amplia concepción del libro.
·         Los e-books aumentan el negocio para los escritores, sobre todo para los nuevos escritores y aquellos que todavía no tienen el reconocimiento del público y que intentan por medio de la publicación online de su obra buscar un hueco en el mercado y llegar de forma más fácil a sus lectores potenciales.
·         Los libros electrónicos facilitan el acceso de los lectores a un número muy elevado de libros, muy superior al de cualquier biblioteca. Además,son fácilmente transportables, y ocupan un espacio físico muy reducido.Por otra parte la hipertextualidad que permiten los libros electrónicos es un gran valor añadido para el lector.
·         Estima que la descarga de un e-book se debe comparar con el hojear un libro en una librería. El acceso online gratuito al libro no tiene porque implicar una disminución de las ventas del mismo título en un soporte físico. También indica que es una paradoja considerar que los libros electrónicos son un fracaso y al mismo tiempo afirma que hay una creciente piratería de los mismos. Piratería, sobre la que vaticina, irá en aumento.
·         Las dos propiedades que permitirán el éxito de los e-books son: ser fáciles de compartir, pues se pueden enviar fácilmente de forma electrónica a un amigo, por lo tanto tienen una elevada inmediatez y son fáciles de manipular. El contenido de los libros electrónicos se puede copiar y transformar, cortando y troceando los textos. Y estos son precisamente los aspectos que más polémica generan en la industria editorial, esto es la preservación del copyright, y la piratería de las obras,pero que son características básicas en la concepción del libro. Sin embargo se advierte sobre el problema de la perdurabilidad de los contenidos por los frecuentes cambios tecnológicos que se producen en el mercado de los libros electrónicos.

¿Cuáles son sus puntos débiles?:

La facilidad en la duplicación de sus contenidos conlleva que se presenten una serie de problemas tanto para los productores como para los consumidores en relación al tema de los derechos de autor. Los editores deben buscar un punto de equilibrio entre la defensa del copyright y cierta flexibilidad en el uso del e-book por parte de los lectores. Además, los recursos multimedia no son algunas veces bien recibidos por los lectores, ya que se presentan problemas en el manejo de estos recursos por lo que consideran que su uso es difícil. Finalmente mucha gente todavía prefiere leer libros impresos, según se especifica en la publicación de la Educause Learning Iniciative donde se deduce que para algunos personas que disfrutan leyendo una novela tranquilamente sentados en un sofá, un e-book puede llegar a ser considerado como un anatema.

A pesar de las ventajas que reportan tanto para el lector como para el editor y el autor, los e-books no tuvieron en un primer momento el éxito económico que se estimaba. Una serie de problemas limitaron de forma considerable el crecimiento del mercado de los libros electrónicos. Estos problemas estaban relacionados con la calidad de la lectura en la pantalla lo que dificultaba el cambio de hábitos de los lectores al pasar de leer en papel a leer en pantalla, el elevado precio de los dispositivos de lectura y de los libros, el establecimiento de diferentes estándares por parte de los fabricantes de dispositivos y empresas editoriales, la reducida oferta de libros y las excesivas protecciones puestas por la industria para evitar los problemas de piratería de los contenidos. Todo ello restringía en un grado muy elevado el uso de los libros electrónicos por parte de los lectores. El problema de la posible copia ilegal de los libros es también una fuerte restricción que se presenta a los editores a la hora de plantearse a la edición online de sus producciones, existiendo un cierto pánico en el sector ante el tema. Los e-books lógicamente no implican la desaparición de los editores, la publicación de libros digitales exigirá el mismo tipo de actividad profesional que ahora, y (casi) el mismo tipo actividad industrial que ahora, serán necesarios profesionales que seleccionen los mejores originales, expertos que realicen buenos productos editoriales, una buena infraestructura informática, campañas publicitarias para promocionar los productos.

La introducción en el mercado de nuevos dispositivos mucho más eficientes para la lectura de los libros electrónicos es básica para conseguir un uso más generalizado entre la población lectora, como lo afirma Lluís Codina en su libro “El libro digital y el futuro de la edición”: “el libro digital desplazará al libro en papel de manera significativa cuando los equipos informáticos proporcionen la misma ergonomía de visualización y comodidad de uso que proporcionan los libros actuales, pero no antes”. Empresas como Barnes&Noble, Google Books, Apple, Sony se posicionan en la comercialización de los libros digitales en un terreno que antes era dominado por el Kindle de Amazon. Esta disputa por el mercado jalona la introducción de nuevos lectores de e-books, mejorando su calidad y su precio, beneficiando obviamente a los consumidores. No se olviden visitar el link comparativa de lectores electrónicos , donde se analizan los modelos que mayor impacto están logrando en los consumidores.

El libro electrónico cambia la forma de leer, y este cambio que es considerado como la característica verdaderamente distintiva con respecto al libro impreso en papel plantea el reto al lector sobre una nueva forma de leer los textos, es un problema de cambio de hábitos: si el lector se adapta al cambio podrá disfrutar de todas las posibilidades que le brindan los ebooks, pero el lector tiene que tener en cuenta que la plena utilización de todas sus potencialidades exigen un lapso de tiempo diferente a la requerida por los libros físicos. Si el lector se adapta a las novedades que conllevan las nuevas tecnologías podrá disfrutar de nuevas experiencias lectoras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario